El otro día alguien escribió un comentario en mi blog, un comentario intrigante y superfluo y a la misma vez, algo muy íntimo y personal. No sé quién era, pero creo que es alguien que me conoce bien o que al menos, ha leído gran parte de mi blog.
Las palabras eran las siguientes: “El corazón nunca olvida su pasado pero aprende a seguir adelante”.
La verdad es que sí, el corazón nunca olvida y basta un simple gesto, una llamada, una canción, para que todo lo que viviste una vez vuelva otra vez a aflorar en tu vida. La razón es otra cosa, solemos siempre intentar racionalizar los sentimientos cuando es algo que se escapa a nuestro poder, somos simples objetos de nuestro corazón, él es el que manda.
Desde Barajas
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